Cuando

Cuando de cualquier pensamiento eres el eje central, cuando más que una ilusión eres una realidad, cuando más que nada eres todo, cuando por cada segundo me devuelves una vida, cuando dices tantas y tantas cosas con esa sola mirada es cuando me pregunto ¿Qué he hecho yo para merecer esto? ¿Acaso merezco yo tanto? No lo sé, solo se que al despertarme lo único que veo es el mar de tus ojos, ese que tanto me gusta me encanta y me enamora, que cuando duermo solo pienso en el fino hilo de oro que enredo entre mis dedos y me gusta tocar durante horas.  Sólo se que ocupas casi la totalidad de mi pensamiento, más que unas horas, un año entero. Cuando me tocas, cuando me besas, cuando me miras, cuando te siento, cuando me susurras, cuando estás conmigo, cuando te sueño, cuando yo te miro, siempre presente, aunque quiera evitarlo, aunque no quiera sentirlo, en cada instante te presentas como ese ángel que te rescata del infierno, un infierno al que me sentía condenado. Ahora que lo se, ahora que lo asumo, solo puedo decirte que irme a dormir sabiendo que mañana cuando despierte podré escuchar tus voz es el mayor regalo que el cielo ha podido darme. Sólo me queda decirte una cosa, decirte que te quiero, cada instante, cada hora.

 QUE USTEDES LO DISFRUTEN

WALTER HEGOR