Sueño y realidad
La otra noche soñé
con que una alegre princesa
me daba las buenas noches
mientras besaba con fuerza.
Princesa de pelo de oro
y con un mar por mirada,
un mar templado y calmado
capaz de reflejar almas.
Con porcelana por dientes,
con sonrisas en vez de habla,
con ternura y con caricias,
con una preciosa cara.
Con un corazón enorme
que lo entrega a quien le escucha,
con él puede enamorarte
sin ningún tipo de dudas.
Soñé con esa princesa
que me miraba a la cara,
mientras dejaba que el sueño
en realidad transformaba.
QUE USTEDES LO DISFRUTEN
WALTER HEGOR
1 comentario
magnica -